Reto

Después de que Covid-19 llegara a España y sufriéramos una cuarentena que nos encerró en casa durante cuatro meses, uno de los sectores más afectados por el cierre total fue el de las pequeñas empresas.

En la primera fase de desorden, estos negocios fueron los primeros en reabrir, los más debilitados, desorientados y aterrorizados. Era necesario que todos ayudáramos y continuásemos trabajando en el posicionamiento de Vodafone, más concretamente Vodafone Business, que lleva años ayudando a los autónomos y al desarrollo digital de sus negocios con diferentes iniciativas.

Como “su socio en la era digital”, no podíamos mirar para otro lado. Fueron momentos difíciles en los que debíamos demostrar que estábamos del lado de nuestros clientes. Cumpliendo los objetivos de percepción de confianza y lealtad.

En ese momento, más que en ningún otro momento, era necesario demostrar que Vodafone como empresa está con sus clientes, comprende sus inquietudes y objetivos, y les ayuda a afrontar unos y conocer otros. Encontrar una forma eficaz (y expresa) de apoyar a las pymes no debería ser una decisión de marketing, era nuestra obligación. Su mayor necesidad en ese momento era comenzar a recuperarse, para lo que necesitaban los clientes, para lucir como nunca antes. Tuvimos que ayudarlos a destacarse y diferenciarse.

Solución

La clave. Renunciar a nuestras tarifas y mensajes de campaña para hacer campaña a favor de aquellos que lo necesitaban. Dar toda nuestra ayuda a nuestros clientes para que sumaran sus negocios a la iniciativa y se publicitaran en un medio que antes les resultaba inaccesible.

La eficiencia fue primordial: creamos una plantilla gráfica para los diferentes tipos de negocio con creatividades dinámicas que se adaptaban a los datos de cada uno: sector, nombre del negocio y dirección exacta. Y, gracias a la tecnología XY de dentsu, las vallas publicitarias se personalizaron automáticamente mediante el cruce de datos de las empresas y ubicaciones de medios más cercanas.

Resultados

La primera y más importante consecuencia fue la reacción de nuestros clientes. Los mensajes de agradecimiento que recibimos de todos ellos y cómo ha fortalecido aún más nuestra relación en el futuro.

Los medios de comunicación pronto se hicieron eco de la iniciativa y fue aplaudida popularmente, fomentando el sentimiento positivo hacia Vodafone y ayudando a mejorar la imagen de marca empática, cercana y comprometida que nos esforzamos por reforzar cada día.

Gracias a esta activación de soporte para pequeñas empresas, logramos un valor publicitario de más de 450.000€.

Alcanzamos picos de cobertura del 75% en algunas de las ciudades previstas, como es el caso de Madrid, para conseguir el mayor efecto posible y el mayor tráfico a los establecimientos para darles soporte en tiempos tan difíciles.